El pescado es una de las comidas habituales en Semana Santa. Este tipo de carne es considerado uno de los alimentos más saludables que existe, ya que contiene diversos nutrientes como proteínas, Vitamina D y es una de las mejores fuentes de Omega-3.
Sin embargo, para evitar enfermedades es importante seguir algunas recomendaciones al elegirlo, manipularlo y cocinarlo. Esto se debe a que muchos tipos de bacterias crecen en los productos animales, según reporta el sitio HealthLine, y pueden causar malestares que podrían arruinar el fin de semana largo. Además, el pescado se descompone más fácilmente que otros tipos de alimentos y por eso es importante tener más cuidados para mantener su calidad.
De acuerdo al Departamento de Agricultura, de Estados Unidos, existen 4 pasos esenciales que ayudan a disminuir los riesgos de contraer enfermedades a través de los alimentos:
- Limpieza: lavar manos y superficies de la cocina a menudo.
- Separar: separar los alimentos al comprarlos y guardarlos en el refrigerador para evitar la contaminación cruzada.
- Cocinar: utilizar la temperatura adecuada, para que los alimentos queden cocidos tanto por fuera como por dentro.
- Enfriar: refrigerar y almacenar las sobras apropiadamente.
1- Cómo seleccionar
Al comprar pescado envasado es importante fijarse en la fecha de vencimiento. Una sugerencia cuando se va al supermercado, es dejar la adquisición del pescado para el final para así acortar el tiempo en éste está afuera del refrigerador.
El sitio HealthLine recomienda no elegir pescados cuyo color se vea pálido, cuya carne esté demasiado blanda o tenga un aspecto pegajoso o un olor fuerte. También es importante revisar los envoltorios y no escoger aquellos que estén dañados, rotos o goteando ya que aumentan las probabilidades de que estén expuestos a bacterias.
En caso de comprar pescado fresco, elegir aquellos que estén refrigerados o dispuestos sobre una cama gruesa de hielo. De acuerdo a la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés), los ojos del pescado no debieran verse opacos y tendrían que ser un poco protuberantes. Además, sugiere fijarse en que su carne sea firme, brillante y las agallas rojas.
2- Almacenarlo
Se recomienda poner el pescado en hielo o almacenarlo en el refrigerador lo más pronto posible después de comprarlo, según señala la FDA. Si no se lo va a cocinar dentro de uno a dos días luego de adquirido, se sugiere congelarlo y escribirle la fecha en la que fue adquirido. Por ejemplo, el salmón duraría 3 meses en ese estado, de acuerdo con la Clemson University.
Al almacenarlo se recomienda utilizar bolsas con sello, tipo ziplock para evitar la contaminación cruzada.
3- Manipulación
Al momento de preparar cualquier tipo de carne, es importante lavarse las manos con jabón constantemente. El sitio HealthLine explica que las bacterias pueden esparcirse rápidamente, por eso se recomienda hacerlo con jabón y agua limpia por al menos 20 segundos, antes y después de manipular carne, sea ésta cruda o cocida.
Para aprender sobre un modo eficaz de lavarse las manos, puedes acceder a este enlace.
También se sugiere preparar el pescado en una superficie separada de los otros alimentos; una forma es utilizar una tabla de picar exclusiva para ello y lavar los utensilios con jabón y agua caliente antes usarlos para preparar otros alimentos.