La conjuntivitis puede darse a cualquier edad y es una condición en la cual los ojos se ponen de un todo rosado o rojizo, producto de una inflamación de la conjuntiva, que es la membrana fina y transparente que cubre el interior del párpado y la parte blanca del ojo.
Múltiples factores pueden provocar conjuntivitis, pero en el verano se vuelve bastante común por una razón específica: el agua de playas y piscinas.
Y es que tanto en el mar como en ríos y lagos, puede haber virus y bacterias que irriten esta sensible parte del rostro, explica el doctor Fernando Llovet, de la Clínica Baviera en España, a la cadena hispana ABC.
En el caso de las piscinas, el riesgo es aún mayor producto del cloro, que puede irritarnos fácilmente.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por su sigla en inglés), además de la rojez en la parte blanca del ojo, otros síntomas que presenta esta patología son:
-Aumento del lagrimeo.
-Secreción ocular, que puede ser transparente, amarilla, blanca o verde.
-Picazón, irritación o ardor en los ojos.
-Sensación de tener arena en los ojos.
-Lagañas en los párpados o las pestañas.
-Incomodidad al usar lentes de contacto.
De acuerdo a la enciclopedia médica MedlinePlus, en ocasiones la conjuntivitis puede pasarse sola, sin requerir ningún tratamiento. Esto ocurre, por ejemplo, cuando se presenta por un virus y por alergia a alguna sustancia específica.
No obstante, los CDC recomiendan consultar a un médico si el enrojecimiento es muy intenso, si tenemos dolor moderado o fuerte en los ojos, sensibilidad a la luz, visión borrosa, o si los síntomas no mejoran después de 24 horas, incluso aplicando algún tratamiento.
Por su parte, los bebés o recién nacidos sí o sí tienen que ver a un médico de inmediato si presentan síntomas de esta patología.
Prevención
Para prevenir la conjuntivitis si vas a nadar a alguna piscina o fuente natural de agua, puedes tomar las siguientes medidas, recomienda el doctor Llovet.
-Usa lentes especiales para nadar.
-Evita frotarte los ojos.
-Lávate la cara con agua limpia tras bañarte.
-No compartas toallas, porque te puedes contagiar desde otra persona.
-Tampoco compartas productos cosméticos.
-Seca bien las toallas.
-Usa gafas para proteger tus ojos del sol y la arena.
-Evita usar lentes de contacto mientras te bañas.