La miopía es una de las patologías a la vista más comunes entre la población, y en muchos casos se origina desde la niñez o la adolescencia.
Puede ser causada por diferentes razones, entre ellas un factor genético, pero también hay otro motivo que puede propiciar su aparición: el excesivo uso de dispositivos móviles.
Así lo indica un estudio realizado por la cadena española Multiópticas. Según cita el medio hispano ABC, el informe determinó que al 88% de los padres encuestados les preocupa el hecho de que sus hijos pasan demasiado tiempo frente a las pantallas digitales.
Y tienen razón en inquietarse porque, de acuerdo al óptico optometrista José María Herce, “entre semana no deberían estar tres horas (frente a una pantalla), sino una hora, hora y media como máximo”.
“Durante los fines de semana se podría ampliar un poco más, pero siempre compaginando con actividades al aire libre, siempre que el tiempo lo permita. De alguna forma, monitorizar el consumo para el público infantil, más sensible y con el ojo todavía en formación”, recalca.
Esto es corroborado por Manuel Díaz Llopis, académico de Oftalmología de la Universidad de Valencia, quien explica a ABC que efectivamente el exceso de exposición a pantallas puede incidir en las enfermedades a la vista.
“El hecho de que, cada vez más, los menores trabajen más la vista estando expuestos a la influencia de las pantallas y pasen menos tiempo al aire libre, está favoreciendo la aparición de afecciones oculares como la miopía”, afirma.
Por ello, recomienda a los padres incentivar más actividades al aire libre y estar conscientes de que, si bien no es necesario eliminar por completo la tecnología de la vida de los niños, sería muy útil limitar su uso.
Por su parte, Herce aconseja disminuir el nivel de brillo de las pantallas y no mirarlas a menor de 35 o 45 centímetros de distancia.