Durante el otoño e invierno, en muchos hogares tiende a utilizarse más electricidad debido a que disminuyen las horas de luz solar y, además, las bajas temperaturas pueden motivar a utilizar calefacción eléctrica, como estufas y calientacamas.
Todo esto puede provocar que aumente la cuenta de la luz y, por consiguiente, nuestro bolsillo podría verse afectado. Para ayudarte a paliar este gasto, aquí te tenemos algunos consejos.
1- Puedes considerar invertir en un termostato
Los termostatos son dispositivos que detectan la temperatura que hay en una habitación y, en función de ésta, apagan o encienden la energía de máquinas como el aire acondicionado o la calefacción. De este modo, puedes controlar más fácilmente el calor que quieres lograr dentro de tu hogar.
De este modo, si quieres gastar menos en calefacción, también puedes bajar el termostato para asegurarte de no sobrepasar cierta temperatura.
2- Trata de abrigarte dentro de la casa
Si bien usar calefacción durante el invierno suele ser una necesidad, para mantener los hogares temperados y disminuir la humedad en el interior, eso no quiere decir que podamos andar en shorts y polera por la casa.
En ese sentido, la compañía eléctrica española Esfera luz recuerda que la temperatura ideal en espacios cerrados es entre 19ºC y 21ºC, y si aun sigues sintiendo calor, siempre puedes tratar de abrigarte más.
3- Intenta apagar la calefacción cuando duermes
A veces hace tanto frío en la noche, que muchos se sienten tentados de dejar encendida la estufa o el calientacamas mientras duermen.
Lo cierto es que puede ser peligroso dejar calefactores prendidos cuando no hay nadie para controlarlos, y respecto al calientacamas, si quieres ahorrar energía, puedes dejarlo apagado y simplemente añadir otra frazada durante la noche.
Además, Esfera Luz acota que si en la mañana enciendes la estufa a una alta temperatura, para que se caliente el ambiente más rápido, consumirá menos energía en comparación a dejarla durante toda la noche.
4- Acuérdate de limpiar las lámparas y ampolletas
Para ahorrar luz, hay consejos que pueden parecer obvios, pero que a veces se nos pasan. Uno de ellos es limpiar con frecuencia las ampolletas, pantallas y lámparas en general, lo cual puede ayudar a que iluminen más sin tener que aumentar la potencia, indica el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía de España.
También aconseja pintar las paredes y el techo de colores claros, pues reflejan mejor la luz.