Una de las mejores cosas del verano es la diversidad de frutas disponibles para todos los gustos y paladares: cerezas, sandías, duraznos, chirimoyas, etc. Y dentro de este abanico de posibilidades las frutillas son unas de las más populares por su dulce sabor, su atractivo color y lo sencillo que es comerlas.
Según el sitio de la BBC GoodFood, las frutillas se han disfrutado desde la época del imperio romano. En 1714, un ingeniero francés asignado a Chile y Perú se dio cuenta de que las frutillas de estas regiones eran mucho más grandes que las europeas y las llevó a su país para cultivarlas allá volviéndolas muy populares.
Pero no sólo su sabor es delicioso, sino que además esta fruta está cargada con vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes. Según el sitio de salud WebMd, las frutillas estarían entre las 20 frutas con más capacidad antioxidante y son una buena fuente de manganeso y potasio. Además, una porción de ellas (consistente en 8 unidades) entrega más vitamina C que una naranja (86.5 milígramos versus 69.7 mg aproximadamente). A continuación, te contaremos un poco más sobre algunas de las bondades de esta sabrosa fruta del verano.
1- Podría prevenir el cáncer
Diversos estudios han vinculado el desarrollo del cáncer con el estrés oxidativo – acumulación excesiva de radicales libres que afecta a células, tejidos y órganos; responsable del envejecimiento prematuro- y la inflamación crónica. Por otro lado, investigaciones científicas han coincidido en que frutillas, moras, frambuesas y arándanos podrían prevenir varios tipos de cáncer por su capacidad de combatir al estrés oxidativo y la inflamación.
2- Ayuda a mejorar la salud del corazón
Según el sitio MedicalNewsToday, la prestigiosa Universidad de Harvard descubrió que el consumo regular de berries (frutillas, frambuesas, arándanos, moras, etc.) podía reducir el riesgo de padecer un ataque al corazón en un 32% en mujeres de mediana edad. Esto por contener flavonoides, pigmentos vegetales con poder antioxidante, que previenen el envejecimiento celular y los procesos degenerativos.
3- Ayudaría a regular el azúcar en la sangre
Las frutillas tienen un índice glicémico bajo y son ricas en fibra y, según MedicalNewsToday, esto ayudaría a regular el azúcar en la sangre, evitando alzas y bajas extremas.
Un estudio realizado el año 2011 por el Instituto Salk de Estudios Biológicos, de California, determinó que consumir 37 frutillas al día podía reducir significativamente las complicaciones de la diabetes como la nefropatía (daño renal), esto debido a la presencia de un componente llamado flavonoide. Existe la posibilidad de que los flavonoides mejoren y estabilicen la secreción de insulina desde las células beta pancreáticas.
4- Promovería una digestión saludable
El sitio AuthorityNutrition sostiene que el 26% de los carbohidratos de las frutillas son fibra. Una taza de frutillas entrega 3 gramos de fibra, la cual es importante para mantener las bacterias que son beneficiosas para la salud y mejorar la digestión.