La trombosis es un coágulo sanguíneo que se forma en una vena profunda del cuerpo, usualmente las piernas o muslos, que al desprenderse puede causar problemas en los pulmones o incluso un infarto, según la enciclopedia médica MedlinePlus.
Esta condición se ha presentado en una cantidad baja de personas que han recibido la vacuna contra el coronavirus desarrollada por la empresa farmacéutica británica AstraZeneca.
En Chile, el primer caso fue reportado por las autoridades el 2 de junio de 2021, momento en que el Ministerio de Salud (Minsal) informó que fueron notificados “el martes 1 de junio de un Esavi (Eventos Supuestamente Atribuibles a Vacunación e Inmunización) que afecta a un hombre de 31 años, quien presenta un cuadro de trombosis y trombocitopenia, evento descrito en la literatura internacional, de muy baja frecuencia”.
¿Qué tan raros son estos coágulos?
En el Reino Unido, por ejemplo, a fines de mayo se habían reportado 309 pacientes con trombosis tras recibir la vacuna de AstraZeneca, de los cuales sólo 15 fueron tras la segunda dosis, y 56 de ellos murieron.
Esto es considerando que 23 millones de personas recibieron la primera dosis en esos países y 9 millones la segunda, reportó la cadena BBC.
En base a esto, las autoridades británicas calculan que la probabilidad de presentar trombosis con la vacuna AstraZeneca es de 12,3 por cada 1 millón de dosis.
La publicación europea añade que es más común en mujeres y en menores de 40 años.
Síntomas de la trombosis
Considerando estas cifras, es raro sufrir de coágulos tras la vacuna, pero en caso de que ocurra, te contamos que los síntomas usualmente aparecen a los 4 días o más de ser inoculado, y en especial tras la primera dosis.
De acuerdo a MedlinePlus, los síntomas más comunes de trombosis son:
-Cambios en el color de la piel (enrojecimiento)
-Dolor de pierna
-Inflamación de la pierna (edema)
-Piel que se siente caliente al tacto
La BBC añade que igualmente debería consultarse a un médico si se sienten:
-Un dolor de cabeza que no se quita con medicamentos y que va empeorando.
-Un dolor de cabeza que es inusual y que va acompañado de visión borrosa, sensación de malestar general, problemas para hablar o somnolencia.
-Debilidad o convulsiones.
-Dificultad para respirar.
-Dolor en el pecho.
-Dolor persistente en la zona abdominal.
Si sientes algunos de estos síntomas, te recomendamos acudir a urgencias.