El cáncer de mama es una enfermedad que causa más de 458 mil muertes en el mundo cada año, mismo período en que se detectan al menos 1,38 millones de nuevos casos, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Esta patología puede afectar a cualquier persona, pero principalmente lo sufren mujeres. Y sólo en el 5% a 10% de los pacientes es heredado, lo que quiere decir que pueden tenerlo quienes no poseen ningún familiar con la patología, indica la clínica estadounidense Mayo.
Por lo mismo es importante que todos, y en especial las mujeres, estén realizándose exámenes con frecuencia, que permitan detectar un tumor a tiempo.
En las mujeres sobre 40 años, es recomendado que se realicen una mamografía anualmente, y en aquellas mejores a esa edad, suele pedirse una ecografía mamaria, con una frecuencia determinada por el médico tratante.
Y si bien los exámenes son la principal forma de detectar la patología, hay otros síntomas que pueden delatar la enfermedad.
Según la Asociación Americana del Cáncer, “una parte importante de la salud de los senos consiste en saber cómo se ven y se sienten normalmente (…) El síntoma más común del cáncer de mama es una nueva masa o protuberancia. Una masa no dolorosa, dura y con bordes irregulares tiene más probabilidades de ser cáncer, aunque los tumores cancerosos del seno también pueden ser sensibles a la palpación, blandos y de forma redondeada. Incluso pueden causar dolor”.
Además, otros signos pueden ser:
-Hinchazón de todo el seno o parte de él (aunque no se sienta una protuberancia definida).
-Irritación de la piel o formación de hoyuelos (a veces parecido a la cáscara de una naranja).
-Dolor en el seno o en el pezón.
-Retracción (contracción) de los pezones.
-Enrojecimiento, descamación o engrosamiento de la piel del seno o del pezón.
-Secreción del pezón que no sea leche materna.
-Algunas veces un cáncer de seno se puede propagar a los ganglios linfáticos de las axilas o alrededor de la clavícula y causar una protuberancia o hinchazón ahí, aun antes de que el tumor original en el seno sea lo suficientemente grande como para poderlo palpar.
Si sientes cualquiera de estos síntomas, te recomendamos consultar con un médico a la brevedad, pero reiteramos que los exámenes rutinarios pueden ser muy relevantes para detectar un tumor en su etapa temprana, así que te aconsejamos realizarlos con la frecuencia decidida por tu especialista tratante.