Nunca es recomendable dejar a un niño desatendido en un auto: el vehículo podría ser robado con el menor adentro, existe el riesgo de que el niño desactive el freno de mano y el auto se desplace; si se deja la llave puesta el pequeño podría pasarse al asiento del chofer e intentar manejarlo; y si es capaz de abrir una ventana se puede caer a través de ella, entre otras razones de peso. A esto se añade que con la llegada del calor el peligro se vuelve mucho mayor: bastan unos cuantos minutos para que el interior del vehículo alcance temperaturas que pueden poner en riesgo su vida o causarle daños irreparables a su salud.
El grave problema es que tu auto se transforma en un horno al estar estacionado en el calor. Según un informe del Real Automóvil Club de Cataluña (RAAC), cuando la temperatura exterior es de 25° C el interior del auto puede alcanzar 40° C en 40 minutos. Y si afuera hay 35° C, dentro del auto se puede llegar a 55° C en una hora.
Además el informe desecha el mito de que dejar las ventanillas entreabiertas disminuye la temperatura interior, ya que esta medida sólo la reduce en unos dos grados.
Y tampoco hay que dejarse engañar por los 40 minutos mencionados anteriormente, ya que en los primeros minutos la temperatura puede incrementarse en 10 grados. Los niños son especialmente vulnerables a los golpes de calor, porque su aparato respiratorio está menos desarrollado y se pone en riesgo su salud y vida. Por lo tanto, se recomienda que jamás se deje a un niño, sin supervisión de un adulto, adentro de un vehículo.
Lo mismo aplica para las mascotas que también son muy vulnerables a las temperaturas extremas, porque no poseen un mecanismo de sudoración para refrigerar el cuerpo como sí lo tienen los seres humanos.
A continuación algunos puntos a considerar:
1- No hacer excepciones
Nathan Allen, doctor de emergencias de la Universidad de Chicago, aclaró para el sitio Web Med que nunca está bien dejar a un niño o una mascota adentro de un auto: “No existe un período de tiempo seguro para dejar a un menor solo en un vehículo. Los niños son más susceptibles y tienen un riesgo mayor de experimentar lesiones y enfermedades relacionadas a altas temperaturas, porque sus cuerpos producen más calor relativo a su tamaño y sus habilidades para enfriar a través del sudor no están desarrolladas como las de los adultos”. Por lo mismo, bastan unos pocos minutos para tener un resultado fatal.
2- Lo que puede suceder
Cuando la temperatura del cuerpo supera los 40° C podría ocurrir un infarto por golpe de calor cuyos síntomas son mareo, desorientación, agitación, confusión, lentitud, convulsiones, pérdida de consciencia e incluso la muerte.
3- Dejar recordatorios visuales y no confiarse en la memoria
Aunque parezca insólito es posible que suceda que padres olviden que su hijo está durmiendo en el asiento trasero del auto. Y, lamentablemente, esto es algo que le podría suceder a cualquiera.
Así lo afirma Mark McDaniel, profesor de sicología de la Universidad de Washington, Estados Unidos: “La memoria enfrenta un desafío cuando necesita recordar algo que usualmente no haces todos los días, como ir a dejar a tu hijo al colegio. A lo mejor la mamá es la encargada de esta tarea y, por algún motivo, el padre asume la responsabilidad una vez. Si el pequeño se ha quedado dormido en su silla de auto, que usualmente está ubicada detrás del chofer, no hay información visual para acordarse de que hay un pequeño a quien ir a dejar y si no lo has hecho cada día necesitas una pista”, explicó para el sitio Web Med.
Para evitar el olvido, el experto recomienda hacerse recordatorios como decir constantemente en voz alta que hay que llevar al niño al colegio. Otra idea es dejar pistas visuales, por ejemplo poner el maletín al lado del pequeño o la pañalera en el asiento del copiloto.
4- No dejes que los niños jueguen dentro del auto
Una medida eficaz es cerrar los autos con seguro cuando no se están usando y poner las llaves fuera del alcance de los hijos, lo cual podría impedir que queden encerrados en el vehículo por accidente.