Lo que comes puede influir en tu ánimo: conoce cómo la dieta influye en tu bienestar emocional

Lo que comes puede influir en tu ánimo: conoce cómo la dieta influye en tu bienestar emocional

Hoy en día, existe una creencia popular que plantea que la alimentación es equivalente a la medicina, pero, ¿qué tan real es esto? Si bien no reemplaza el tratamiento de un profesional de la salud, lo que se come impacta directamente en el bienestar físico y emocional.

La nutricionista zonal de la región Metropolitana de IST Mutualidad, Catalina Bustos Vergara, explicó que la conexión entre dieta y salud integral tiene que ver principalmente con dos conceptos clave, que son la microbiota y el eje intestino-cerebro.

Un informe de la Clínica Mayo de Londres puntualizó que el eje intestino-cerebro influye en la salud mental y viceversa. Por otro lado, la microbiota es un conjunto de microorganismos vivos (bacterias, virus, hongos, levaduras y otros) que se encuentran en el cuerpo -principalmente en zonas con muchos fluidos- y, de alguna forma, mantiene conectadas las diversas partes del cuerpo a través de la mucosa.

En palabras de Bustos, “no es que sean aisladas unas de las otras, sino que se comunican entre sí. Por eso también hay mucosa, porque el muco finalmente lo que hace es mover ciertas señales de una microbiota a otra”. 

“Lo que quiere decir esto es que las microbiotas al comunicarse entre sí, se pueden generar, por ejemplo, que lo que pasa en la digestiva, no necesariamente se expresa ahí, sino que puede generar una respuesta por medio de la respiratoria”, comentó.

Considerando lo anterior, lo que se come puede generar no necesariamente síntomas digestivos exclusivamente, sino que, por ejemplo, respiratorios, alergias, dermatitis o dolores de cabeza.

La especialista planteó que “con esto podemos decir, por lógica, que lo que comemos sí va a afectar a nuestras emociones, energía, sueño y va a generar sintomatología, porque en el fondo, solo la microbiota en general puede, afecta al sistema inmune, a la expresión de genes y así también en el eje intestino cerebro a las emociones, como la ansiedad, etc”.

Alimentos que favorecen el bienestar

Para promover el bienestar emocional se recomienda ingerir mayor cantidad de alimentos que nutran esta flora intestinal y disminuir la ingesta de productos que la afectan. Esto, considerando siempre que cada cuerpo funciona de manera diferente y que lo primordial es contar con asesoría nutricional de profesionales.

Catalina Bustos detalló que “las frutas, las verduras, legumbres, comidas ricas en omega-3, los cereales integrales; ingredientes altos en grasas saludables, como semillas, frutos secos, palta, aceites de buena calidad (como el aceite de oliva de baja acidez). Esto se ha visto finalmente con esta última evidencia científica, que ayudan a mejorar los síntomas de la depresión, ansiedad, y además la inflamación”.

En ese sentido, las dietas antiinflamatorias que nutren este microsistema, además, pueden mejorar la calidad de sueño y estabilizar la energía. 

En el caso del ecosistema intestinal, se ve favorecida con el consumo de legumbres y productos con ácidos grasos de cadena corta, al igual que con vegetales crucíferos, como repollo, coles de Bruselas, brócoli, coliflor, alcachofa y kale.

La nutricionista zonal de la región Metropolitana de IST Mutualidad especificó que “esto no quiere decir que solo esos tengo que comer, sino que lo que estamos haciendo es invitar a tenerlos dentro de tu menú. Tratar de consumir dos veces a la semana legumbres, frutas y verduras todos los días, que estén de forma más cotidiana”.

Para promover un buen descanso nocturno, es relevante seguir el ritmo circadiano en la nutrición. Es decir, comer con la luz del día y evitar los procesados antes de dormir, ya que así se da un rango de tiempo al cuerpo para que digiera lo que come y así, esté relajado al momento de dormir.

Por otro lado, existen ingredientes que favorecen el descanso nocturno, que son aquellos ricos en triptófano, magnesio y vitaminas del complejo B, como plátano, frutillas, almendras, semillas de linaza y cereales integrales. 

Estos nutrientes contribuyen a la producción de melatonina, hormona clave para el sueño.

En cambio, comidas altas en grasas saturadas, azúcar o de digestión lenta, como carnes rojas o frituras, pueden afectar la calidad de cómo dormimos. Por lo mismo, tener una dieta equilibrada no solo impacta en la salud general, sino también en el descanso profundo y reparador que se necesita cada noche y que es fundamental para sentirnos bien.