Los celulares ya son una parte importante en la vida de muchas personas, y son especialmente usados en el ámbito laboral, pues se han convertido en una herramienta vital de trabajo en múltiples rubros.
Pero esta tecnología también puede dañar nuestras relaciones sociales cuando la usamos en exceso, es decir, cuando llegamos al punto en que no podemos dejar de mirar las notificaciones a toda hora.
Así lo advierte la doctora Tchiki Davis en la revista de psicología Psychology Today, donde explica que “la gente joven que usa mucho los dispositivos electrónicos, tiende a experimentar mayor depresión y a tener peor estado de ánimo. Y los smartphones son particularmente problemáticos para las relaciones, provocando que las interacciones sociales sean de menor calidad y con menor empatía”.
En ese sentido, añade que estudios (como éste, publicado por la Academia de Medicina de Nueva York) han concluido que “construir relaciones sociales fuertes es una de las mejores cosas que podemos hacer para mantener nuestra salud física y mental, y podría ser más fácil para nosotros construir estas relaciones en persona”.
Para lograr ello, recomienda tratar de no dejar de lado tus interacciones con tus cercanos en la vida real y preferir hablar con alguien cara a cara, si es posible, en lugar de hacerlo por internet.
Otro consejo que da la especialista es intentar no usar el celular cuando estamos hablando con alguien en persona, porque ello puede interrumpir la conversación e incomodar a nuestro interlocutor.
Si te cuesta dejar de mirar tus notificaciones incluso cuando estás teniendo una conversación cara a cara con alguien, la experta aconseja guardar el celular en algún lugar donde no lo veas, porque así podría serte más fácil controlar las ansias por revisar tus mensajes.
Y si pese a intentarlo, sientes que no puedes alejarte de tu celular por un período de tiempo corto, te recomendamos consultar con un especialista que pueda guiarte de manera profesional.