Las personas están constantemente expuestas a largas y agotadoras jornadas laborales que absorben la mayoría de la energía que se acumula durante el descanso nocturno.
Generalmente durante las tardes o después de almorzar, a muchos los invade una sensación de relajo y sueño absoluto, que les impide continuar con sus tareas diarias o hacerlas de una forma no tan productiva.
Sin embargo, la solución más conocida a este problema es darse un momento para tomar una siesta. Realizar este simple acto de descanso trae consigo numerosos beneficios para la salud.
De acuerdo con el diario español El Confidencial, “la duración perfecta para una siesta sería una suficientemente larga para conseguir que descanses, pero suficientemente corta para prevenir el aturdimiento”.
“Trata de tomar siestas de solo 10 o 20 minutos. Cuanto más tiempo duermas la siesta, más probable es que te sientas atontando después. Sin embargo, los adultos jóvenes podrían tolerar siestas más largas”, así lo corrobora el centro de salud estadounidense Mayo.
En este sentido, con tan solo 15 minutos de un sueño rápido se notará un descanso reparador. También, es necesario tener en consideración ciertos consejos que te permitirá obtener una mejor siesta.
Consejos para una buena siesta
Lo fundamental para sacar provecho de un sueño diurno es tener que necesitarlo, ya que puede no ser buena para todos.
En algunos países- sobre todos en aquellos que poseen un clima mediterráneo o desértico- dormir siesta se ha convertido en una necesidad debido a las altas temperaturas que se registran durante el día.
Por otra parte, también hay ocasiones en las que no se logra completar un buen ciclo de sueño nocturno, por lo que tomar una siesta durante el día puede ser una alternativa perfecta para recuperar las energías faltantes.
También, es fundamental encontrar un lugar cómodo y adecuado para dormir durante unos cuantos minutos.
Generalmente después del almuerzo, muchas personas experimentan una sensación de relajo y aunque mucha de ellas lo viven durante sus horas de trabajo, no basta solo con cerrar los ojos en cualquier lugar.
Para obtener un buen descanso es necesaria hacerlo en un lugar cómodo, de lo contrario, se está expuesto dolores musculares debido a una mala postura si se realiza sobre un escritorio o adoptando una mala postura.
Clínica Mayo señala que se puede realizar en “un lugar tranquilo y oscuro, con una temperatura ambiente cómoda y pocas distracciones”.
Por otra parte, hay que tener presente que las siestas no hacen milagros, pero pueden ayudar a restaurar en parte la energía durante el día.
Para muchas personas «la privación de sueño no sólo se manifiesta en somnolencia, sino también en irritabilidad, fallas de memoria o falta de concentración», señala un artículo del medio británico BBC.
Asimismo, es aconsejable dormir las horas correspondientes durante la noche. Si bien, la siesta complementa el descanso nocturno, bajo ningún punto lo reemplaza.
Beneficios de una siesta reparadora
Son varias las ventajas de tomar una siesta durante después de comer o durante el trascurso de la tarde.
La Fundación Española del Corazón destaca que una buena siesta puede prevenir cardiopatías y reducir la tensión arterial. Asimismo, permite a las personas generar un óptimo aprendizaje, aumentar la concentración, estimular la creatividad, mejorar los reflejos y el estado de ánimo.
Fuentes: Fundación Española del Corazón, El Confidencial, BBC.