Cada fin de año, se juntan dos grandes celebraciones: Navidad y Año Nuevo. Durante esas festividades, una de las protagonistas es la comida, pues a muchos les gusta hacer cenas para compartir en familia.
Esta tradición puede provocar que algunos suban un poco de peso, si es que comen en exceso alimentos poco saludables.
Para que no te pase esto, te tenemos algunos consejos.
1- Puedes preferir postres más saludables
Los postres que son dulces suelen contener bastante azúcar, lo que puede contribuir a la acumulación de calorías vacías. En ese sentido, puedes preferir fruta o preparaciones que incluyan endulzantes como estevia, para disminuir el impacto.
Por si no lo sabes, te contamos que las calorías vacías “se refieren a los alimentos que son altos en calorías, es decir, que son de ‘energía densa’ y además ‘pobres en nutrientes’, lo que significa que sus nutrientes esenciales son muy bajos y tienen pocos o ningún valor nutricional”, explica la nutrióloga Rebecca Gawthorne al periódico digital The Huffington Post.
«Estos son alimentos que están muy procesados, tienen muchos aditivos (azúcar y grasas) y no los necesitamos en las dietas, podemos vivir sin ellos», añade.
La doctora Amaro de la clínica española Feel Good también recomienda, en entrevista con la cadena ABC, comer una fruta antes de almorzar o cenar, porque puede ayudar a controlar el apetito y evitar que comamos en exceso posteriormente.
2- Puedes mezclar carne y pescado
Varias personas disfrutar de hacer asados de carnes rojas durante estas fechas, lo cual puede aportar demasiadas calorías.
Para equilibrar eso, la doctora Amaro propone comer pescado en algunas de las comidas, el cual es saludable y no muy calórico.
3- Intenta comer lentamente
Otra recomendación que da la experta es que intentemos comer con lentitud, dedicando por lo menos 20 minutos a la comida, ya que el cuerpo tarda tiempo en asimilar la comida y hacer que nos sintamos satisfechos.
4- Trata de dormir lo suficiente
Tanto la Navidad como el Año Nuevo se celebran principalmente durante la noche y eso puede afectar nuestra digestión. Así lo indica un estudio realizado por la U. Estatal de Michigan (Estados Unidos) y la U. de China, el cual concluyó que dormir muy poco puede provocar que aumenten las ansias por comer alimentos poco saludables y altos en grasas.
Puedes conocer más al respecto en nuestra nota Cómo dormir mal puede afectar la alimentación.