Cuando llega el verano y es necesario buscar alternativas para refrescarse, pocas cosas superan a un buen chapuzón en una piscina: es entretenido, permite hacer deporte y ayuda a aliviar el calor.
Sin embargo, al bañarnos, muchas veces tragamos agua sin querer. Para no echar a perder la diversión, es recomendable tomar precauciones y así evitar que esto suceda, ya que el agua de las piscinas podría contener bacterias capaces de arruinar las vacaciones.
Un estudio, del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), analizó el agua de 161 piscinas en Atlanta, Estados Unidos, encontrando en el 58% de ellas a la bacteria E. Coli y los parásitos cryptosporidium (crypto) y giardia. Estos resultados son una muestra de lo que podría suceder en cualquier piscina.
Según el sitio LiveScience estos organismos tienden a multiplicarse cuando no hay suficiente cloro o los niveles de pH son muy bajos. Algunos de los síntomas producidos por una infección de dichos organismos son diarrea, dolor de estómago, náusea, vómitos y deshidratación.
El olor a cloro no siempre es un indicador de que el agua carece de bacteria y suciedad. Así lo sugirió a LiveScience Mary Ostrowski, miembro del Consejo de Química Americano de Estados Unidos, ya que dicho olor “es realmente cloramina, que es una sustancia que resulta de la mezcla de cloro y bacteria”.
Algunos consejos de la CDC para prevenir la propagación de enfermedades en piscinas son los siguientes:
1- No bañarse si se tiene problemas estomacales
2- Tomar una ducha y limpiarse con jabón antes de entrar a la piscina
3- Llevar a los niños al baño cada una hora, aunque digan que no lo necesitan
4- Lavarse las manos con jabón después de usar el baño o cambiar un pañal
5- Evitar cambiar pañales al lado de la piscina
6- Evitar tragar agua
7- Recordar beber líquidos, ya que cuando se nada la temperatura del cuerpo aumenta y éste comienza a sudar, aunque es posible que uno no lo note por el hecho de estar dentro del agua. Por esta razón, y por estar expuesto a altas temperaturas del medio ambiente, es importante mantenerse hidratado y tomar un poco de agua cada 15 minutos, incluso cuando no se siente sed.