La actividad física tiene múltiples beneficios para nuestra salud, y uno de ellos es que fortalece nuestra densidad ósea, la que está relacionada con la resistencia que tienen los huesos.
La densidad ósea es un aspecto sumamente importante de nuestra salud, ya que es la que aporta la fuerza y resistencia a los huesos para su correcto funcionamiento.
Los máximos niveles de densidad ósea se alcanzan a los 30 años, tras lo cual comienza una pérdida progresiva.
En el caso de las mujeres, el riesgo de padecer osteoporosis es mayor respecto que a los hombres. Esto aumenta durante la menopausia, ya que la disminución de estrógenos contribuye a este proceso.
Es por esto que a continuación te presentamos tres ejercicios que te ayudarán a reforzar la resistencia de los huesos.
1- Rutinas con pesas
Los ejercicios en que se utilizan mancuernas, se estimulan los “osteoblastos”, células encargadas de ayudar y mejorar la densidad ósea.
2- Ejercicios con impactos
Los ejercicios de alto impacto (aquéllos que obligan a despegar los pies del suelo para realizarse) resultan de gran ayuda para la estimulación en la producción de osteoblastos.
Correr, saltar la cuerda e incluso el tenis son un buen ejemplo de esto, aunque te recomendamos tomar ciertas precauciones para no sobre exigir al cuerpo, y así evitar lesiones.
3- Realizar intervalos en el entrenamiento
Realizar descansos en medio de una rutina de ejercicios estimula la producción de estrógenos.
Tal como mencionamos anteriormente, la disminución de esta hormona está relacionada, en el caso de las mujeres, con la pérdida de densidad ósea.