La mayoría de los trabajadores elige el verano para hacer uso de su feriado anual y salir de vacaciones por, al menos, unos días, ya sea en solitario, con familia o amigos.
Y aunque no se tenga planificado algún viaje, tomarse descansos periódicos es necesario para renovar la energía y evitar el estrés.
Sin embargo, a veces existen dificultades para desconectarse del trabajo en los días libres, en especial quienes tienen cargos que conllevan más responsabilidades en la empresa u organización.
Una opción que puede ayudar a quienes les cuesta despejar la mente de las preocupaciones de su empleo, es tomarse dos o tres semanas seguidas de feriado anual, en vez de solo una semana.
Así lo recomienda Felipe Varela, psicólogo y subgerente de Innovación en Prevención de IST (Instituto de Seguridad del Trabajo) en la región de Valparaíso.
“Se aconseja poder usar las vacaciones en el periodo estival, tanto por el clima como por las vacaciones de los niños, de manera de poder disfrutar con la familia. La recomendación siempre es ojalá tomarse las tres semanas seguidas”, expresó en entrevista con BioBíoChile.
Otro caso es quienes tienen hijos y quieren guardar una semana para el invierno, en cuya instancia pueden tomarse las otras dos en verano.
“En los primeros días de vacaciones, siempre hay un proceso de desconectarse, de salir de la rutina laboral. Hay varias acciones que uno puede realizar, como la desconexión digital, que es alejarse de los dispositivos, y más si uno los tiene asociados al correo o grupos de WhatsApp del trabajo”, añade.
Por lo mismo, es fundamental dejar todo listo en el trabajo previo a los días de descanso.
“Los últimos días, uno está con el cuerpo, en el trabajo, pero con la mente en las vacaciones que vienen. Hay que establecer quién queda a cargo, en quién se delegan las tareas, ver quién es la persona que estará en reemplazo durante las vacaciones, dejar el correo con respuesta automática para informar sobre el uso del feriado legal. Que sea lo menos necesario estar conectándose con el trabajo”, recalca el experto.
La importancia de relajarse en vacaciones
Lo esencial de las vacaciones es poder descansar, y tú decides si prefieres viajar o quedarte en casa. Sin embargo, cualquiera sea tu elección, lo relevante es que busques la forma de relajarte.
“Quizás no todas las personas tienen pensado salir, sino que quieren estar en su casa. Desde ahí, una de las principales recomendaciones tiene que ver con poder realizar actividades que a uno le gusten, como leer, hacer deportes, salir a caminar, etc.”, dice Felipe Varela.
El psicólogo agrega que “el planteamiento también apunta a que estas actividades las compartamos con seres queridos. En términos de salud mental, ayuda muchísimo la calidad del tiempo que uno pase con ellos; se fortalecen los lazos afectivos y se generan conversaciones importantes”.
En ese sentido, destaca que enfocarnos en disfrutar el presente puede ayudarnos a evitar la preocupación por el regreso al trabajo.
“Hay que disfrutar del presente. Si tengo 10 o 15 días de vacaciones, tengo que disfrutar de lo que estoy haciendo en ese momento, desconectándome de la tecnología o de otros lugares, y estando muy presente de lo que estoy haciendo en el momento”, apunta el especialista.
Y cuando se trata de descansar, no podemos olvidarnos de las horas de sueño: dormir 8 horas cada noche y de forma reparadora.
“Ocupa parte de las vacaciones para poder crear un descanso adecuado. Esto tiene que ver con la higiene del sueño, con poder recobrar energías. Hay que tratar de no exponerse a pantallas antes de descansar; cuidar la alimentación y evitar comer muy pesado, porque puede generar malestar; y lo ideal es mantener, los días en que se pueda, cierta rutina que contemple una misma hora para acostarse y levantarse”, aconseja.