Quienes han tenido que lidiar con una hernia discal, saben lo dolorosas que pueden llegar a ser. Pero, ¿en qué consisten?
Nuestras vértebras están separadas por discos, los que amortiguan la columna vertebral y, además, permiten el movimiento entre las vértebras. Esto hace que podamos agacharnos y estirarnos.
Y las hernias discales se originan cuando “todo o parte de un disco de la columna es forzado a pasar a través de una parte debilitada del disco”, señala la enciclopedia médica MedlinePlus.
El portal médico agrega que esto puede ejercer presión sobre los nervios cercanos o la médula espinal.
La importancia de prevenir una lesión de este tipo radica en que a veces la persona no siente ningún síntoma. Mientras, en otras ocasiones, el dolor baja y puede irradiar a la pierna, lo que es conocido como ciática.
Medios especializados como Saber Vivir expresan que si bien los masajes pueden ayudar a aliviar el dolor, no solucionan el problema de una hernia. Es más, Juan Antonio Aguilera, cirujano ortopédico y miembro de la Sociedad Española de Traumatología Laboral, explica que se debe tener “mucho cuidado con las manipulaciones en la columna vertebral”.
Otro mito que derriba el experto tiene que ver con la creencia de que las hernias discales aparecen producto de la vejez. En ese sentido, Aguilera sostuvo que su aparición generalmente se da entre los 35 y 55 años, dependiendo del trabajo que le hayas dado a tu espalda.
MedlinePlus agrega que otros factores que inciden en su aparición pueden ser: levantar objetos pesados, tener sobrepeso, doblar repetitivamente la espalda baja, sentarse o mantener parado en la misma posición por periodos prolongados, llevar un estilo de vida sedentario, y/o tabaquismo.
Si crees que puedes tener una hernia de este tipo, te recomendamos consultar con un médico especializado a la brevedad.