Las proteínas son esenciales para el buen funcionamiento del organismo, ya que son las encargadas de ayudar a reparar las células y producir nuevas. De acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos también son importantes para el desarrollo y crecimiento de niños, adolescentes y para las mujeres embarazadas.
De acuerdo a la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, la cantidad mínima de proteína que un adulto debería consumir al día, para no enfermarse, es 0,8 gramos por kilo de peso. Algunos alimentos ricos en proteína son los huevos, almendras, avena, pollo, leche, yogurt griego, brócoli, atún, quínoa, lentejas, pavo, pescado, maní, repollitos bruselas, carne de vacuno magra, entre otros.
Cuando no se consume suficiente proteína para mantenerse saludable y no enfermar, el cuerpo tiene algunas formas de anunciarlo, las cuales pasaremos a revisar a continuación.
1- Hinchazón de pies y tobillos
Según explica el medio Huffington Post, las proteínas ayudan a regular la cantidad de fluido que hay en los tejidos y la manera en que los músculos se contraen. Por lo tanto, una carencia de proteínas podría producir hinchazón en pies y tobillos.
2- Enfermarse más a menudo
Un estudio publicado por la Sociedad Americana de Microbiología concluyó que la falta de proteína podría resultar en una pérdida de células T, que son un tipo de linfocito (glóbulos blancos) que forman parte del sistema inmunitario. Estas células le ayudan al cuerpo a combatir enfermedades o agentes dañinos como bacterias y virus.
3- Piel quebradiza o irritada
De acuerdo a Reader’s Digest, una deficiencia de proteína podría hacer que la piel se vuelva reseca y quebradiza o irritada, especialmente en las zonas detrás de los muslos y en las nalgas. Esta carencia disminuye la barrera protectora de la piel y la hace más vulnerable a alérgenos.
Por otro lado, las heridas tardan más en sanarse debido a que las proteínas son necesarias para la reparación de los tejidos.
4- No se baja de peso
Alimentos ricos en proteína tardan más tiempo en digerirse que los carbohidratos, por lo cual se queman más calorías procesándolos. También se demoran más en salir del estómago dejando una sensación de saciedad por un tiempo más largo, de acuerdo a AuthorityNutrition, por esta razón las personas con una dieta pobre en proteína podrían necesitar comer más seguido, con la consecuencia de ver un aumento en su peso.
5- Aumento en la caída del cabello
La pérdida del cabello podría ser asociada a una falta de proteína en la dieta, de acuerdo al sitio WebMd. Esta deficiencia hace que el organismo reaccione gastando menos proteína para el crecimiento del pelo y para mantenerlo saludable.
A pesar de la importancia que tiene la proteína para la salud del organismo, su consumo en exceso también puede traer riesgos. Según sostiene el sitio LiveScience, los problemas dependerán del tipo de proteína que se ingiera, ya que a veces éstas son ricas en grasas saturadas y pueden elevar las probabilidades de padecer una enfermedad cardíaca, contribuir a un alza del colesterol, el aumento del riesgo de padecer gota y complicaciones a los riñones.