Fumar cigarro es una de las prácticas más comunes y a la vez dañinas que podemos observar en la población.
De acuerdo a cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaco provoca la muerte de casi 6 millones de personas todos los años, de los cuales más de 5 millones son consumidores directos. ¿Y el resto? Son aquellas personas que no fuman pero que de todas formas están expuestas al humo ajeno.
Lo anterior puede servir como un llamado de atención para fijarse no sólo en este tipo de hábitos sino que también en otros que pueden ser incluso más nocivos, los que pasamos a destacar a continuación.
-Estar sentado todo el día
Permanecer sentado por muchas horas al día puede tener serias consecuencias en nuestra salud. Tal como señaló el periódico norteamericano The Huffington Post, estar largas jornadas en el asiento frente a un computador puede ser factor responsable de algunos tipos de cáncer, como el de mamas y de colon. Para combatir esto, puedes practicar una caminata diaria.
-Comer demasiada carne y queso
Además de sabrosos, la carne y el queso pueden tener varios beneficios en nuestra salud. Eso sí, es importante tener presente que todos los excesos pueden ser perjudiciales, por lo que es aconsejable evitar su consumo diario.
Lo anterior debido a que las proteínas animales son ricas en IGF-1, hormona similar en estructura molecular a la insulina y que tiene un importante rol en el crecimiento infantil (se presenta en mayores niveles durante la pubertad y en menor cantidad en la vejez) pero que no obstante puede promover el crecimiento de células cancerígenas.
-No dormir lo suficiente
El descanso es una parte fundamental de la vida humana, razón por la que los expertos recomiendan dormir unas 8 horas diarias.
Quienes acostumbran a dormir menos -o tienen problemas de insomnio- pueden ver alteradas sus funciones durante el día a día. Pero no sólo eso, ya que además puede llevar a una presión arterial alta, aumentar las probabilidades de sufrir un ataque al corazón, derrames cerebrales y obesidad.