Con la llegada de la primavera, también vuelve la época en que muchas personas tienen períodos de alergia más marcados, ya que hay gran cantidad de personas que son sensibles al polen de las plantas, el cual aumenta en esta época.
Esta reacción, que es similar a la que pueden causar otros alérgenos como el polvo, genera rinitis alérgica, que también conocida como fiebre del heno o alergia estacional.
Según la enciclopedia médica MedlinePlus, esta condición afecta principalmente a la nariz, y el tipo de planta que la provoca puede variar dependiendo de la persona.
Aparte de ser primavera, también influye el hecho de que en los días de calor, y en especial si hay viento, hay más probabilidad de que haya gran cantidad de polen en el aire. En cambio, cuando llueve y hay alta humedad, el polen se queda en el suelo, disminuyendo la reacción alérgica de los pacientes.
Los principales síntomas, aunque no los únicos, son “picazón en la nariz, la boca, los ojos, la garganta, la piel o en cualquier área; problemas con el olfato; rinorrea; estornudos; ojos llorosos”.
¿Cómo prevenir esta reacción alérgica? Es muy difícil evitar por completo el polen en primavera, pero hay ciertas medidas que puedes tomar y que podrían ayudarte.
Sobre cambios en el hogar, MedlinePlus recomienda limpiar con frecuencia para que no se acumule polvo en el interior, controlar el moho, evitar las plantas, retirar alfombras donde se podría acumular el polvo, usar un deshumidificador para secar el aire y disminuir la propagación del polvo y polen, y cambiar el lugar donde duermen y comen las mascotas, que podrían acarrear el alérgeno.
Por su parte, la clínica estadounidense Mayo aconseja mantener puertas y ventanas cerradas, no dejar secando ropa en el exterior porque se pueden contaminar con polen, instalar un sistema eléctrico para contribuir a la ventilación, evitar actividades al aire libre en las mañanas porque a esa hora suele haber más polen, no salir cuando hay mucho viento, y utilizar mascarilla cuando limpias o realizar trabajos en el jardín.
El centro médico también destaca que existe ropa de cama a prueba de alérgenos, que podrían ayudarte a descansar mejor de noche, y que lavar las telas a 54 °C o superior puede contribuir a eliminar la contaminación de ellas.
Si tu condición es muy fuerte, te recomendamos acudir a un médico para que te recete medicamentos y te indique más cambios que puedes realizar en tu día a día.