En medio de la pandemia de la enfermedad por coronavirus Covid-19, hay otra patología respiratoria que ha comenzado a preocupar a la población, la misma que llega todos los años por estas fechas: la influenza.
También llamada gripe, es una infección causada por un virus que cada afecta a millones de personas en el mundo y que, al igual que el coronavirus, se transmite entre personas cuando alguien con gripe tose, estornuda o habla, y expulsa pequeñas gotas contaminadas.
Sus principales síntomas son fiebre o sensación de fiebre y escalofríos, tos, dolor de garganta, goteo o congestión nasal, dolores musculares o del cuerpo, dolor de cabeza, o fatiga (cansancio), detalla la enciclopedia médica MedlinePlus.
¿Cómo se puede prevenir el contagio de la influenza? El principal método es la vacuna que combate el virus, pero también hay una serie de medidas que puedes implementar en tu vida diaria para disminuir el riesgo de contraerla.
Y muchas de ellas son las mismas que hemos estado tomando para prevenir el coronavirus, así que no debería ser muy difícil incluirlas en nuestra rutina. De acuerdo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por su sigla en inglés), la mejor manera de evitar la enfermedad es haciendo lo siguiente:
-Distanciamiento social: evita el contacto cercano con personas enfermas, o si tú sospechas que tienes el virus.
-Cúbrete la nariz y la boca con un pañuelo al toser o estornudar. Después de usarlo, tíralo a la basura y lávate las manos.
-Lávate las manos con agua y jabón frecuentemente. Si no hay agua y jabón, usa un limpiador de manos a base de alcohol.
-Evita tocarte los ojos, la nariz o la boca, porque los gérmenes se diseminan de esta manera.
-Limpia y desinfecta las superficies y los objetos que puedan estar contaminados con gérmenes como los de la influenza.
-Si estás enfermo con alguna patología similar a la influenza, haz reposo en tu hogar por al menos 24 horas después de la desaparición de la fiebre (sin usar medicamentos).
-Si te enfermas, toma los medicamentos que te recetará el médico. Para la influenza se usan fármacos antivirales, que son diferentes a los antibióticos y se venden con receta médica. Estos ayudan a que la enfermedad no se agrave.