Los adultos mayores, y principalmente los que tienen condiciones preexistentes de salud, podrían tener mayores complicaciones si se contagian con la nueva enfermedad por coronavirus COVID-19, que actualmente afecta al mundo.
Las enfermedades crónicas pueden debilitar sus defensas, que ya son más débiles debido a su avanzada edad. Entre ellas están cáncer, diabetes, enfermedades cardíacas, enfermedades pulmonares, presión arterial alta y otras.
Y es que, si bien toda la población tiene la misma probabilidad de contagiarse con coronavirus, los adultos mayores tienen mayor riesgo de desarrollar síntomas graves.
Por ejemplo, el periódico estadounidense The New York Times informó a mediados de marzo que en China, murió el 15% de los infectados mayores de 80 años, mientras que en los menores de 50, el índice de mortalidad era menor a un 1%.
Lo mejor que podemos hacer es cuidar de nuestros adultos mayores, tomando todas las medidas de prevención necesarias para evitar que se contagien.
Lo principal es no visitarlos si no es necesario. Excepto en caso de que alguna persona mayor necesite ayuda específica, o con tareas como hacer las compras, en cuya instancia es poco recomendable que sea ella quien se exponga yendo al supermercado o a la farmacia.
Lo mismo ocurre con los centros de salud: ir sólo si es realmente necesario, porque podría ser más riesgoso acudir cuando no se requiere atención médica.
También procura que no olviden realizar actividades de autocuidado, como alimentarse de manera saludable, hidratarse, hacer un poco de actividad física ligera y tener recreación. Es recomendable evitar reposos muy extendidos, a menos que la persona tenga problemas de movilidad.
Otro consejo es el que se puede aplicar para todas las edades: extremar las medidas de limpieza personal, como el lavado de manos, y la desinfección en áreas comunes para mantener ambientes limpios y ventilados. Al toser y/o estornudar, cubrir nariz y boca con antebrazo o pañuelo desechable. Éste último debe ser arrojado a un basurero con tapa.
Las mascarillas médicas las debes ocupar sólo cuando estés enfermo y te encuentres cerca de otras personas, o debas concurrir a un centro de salud, y al cuidar a otro enfermo que no puede utilizar mascarilla de forma permanente, como un niño.
Las mascarillas son escasas, por lo que hay que guardarlas para quienes realmente las necesiten.
Y si notas que algún adulto mayor tiene síntomas que se pueden atribuir al coronavirus, no dudes en acudir a un centro de salud, porque el tiempo de diagnóstico podría ser vital. Los más comunes son fiebre (mayor a 38 ºC), pudiéndose acompañar de tos, dificultad respiratoria y dolor muscular generalizado.
El virus se propaga principalmente por contacto con una persona infectada, a través de las gotículas respiratorias que se generan cuando el afectado tose o estornuda, o de secreción nasal. Por eso, es mejor mantener una distancia de al menos 1 metro respecto al resto de la gente, y no tocar a otros.